martes, 16 de diciembre de 2008

LA DOBLE MORAL DE ETA

Lierni Armendaritz, miembro de ETA que cumple condena de 57 años y formaba parte del Comando Barcelona responsable del asesinato de Ernest Lluch, respondía con frases así a los miembros de la banda cuando se enteró de que le habían enviado cartas a su cuñado (Txiki Beguiristain) proponiéndole "pagar una cuota anual de 6.000 €".

"(...) Soy Lierni Armendaritz, una militante de ETA que está secuestrada en las cárceles españolas. Ya me han condenado a 57 años. (...) Tal y como dije en un juicio, estoy orgullosa de ser militante de ETA, o por lo menos hasta hace poco podía decir eso con orgullo. (...) ¿Qué ha pasado? Que a mi cuñado, el ex futbolista Aitor [Txiki] Begiristain, le habéis pedido dinero y, por si eso no fuera poco, se lo habéis hecho del modo más torpe y chapucero."

"(...)Con la segunda carta habéis puesto en grave riesgo la salud de mi madre. Mi familia ya está sufriendo bastante con que yo esté en las garras del enemigo. (...) A lo mejor podéis pensar que las cartas no hacen daño por el hecho de estar escritas en un tono suave, pero no es así. No quiero volver a oír a mi madre llorando por vuestra culpa."

A la terrorista Lierni le preocupaba que su madre sufriera porque estaban queriendo extorsionar a un familiar suyo. ¿Y las madres de los demás? ¿Y los familiares de los demás? ¿Y los demás?

Leer el artículo completo, donde se incluyen las cartas enviadas por ETA y las dos respuestas de la terrorista. No tiene desperdicio.

Y NO LES HAGAMOS EL JUEGO:

El diario El Mundo, el 4 de Diciembre, sacaba en portada la foto de los compañeros de partida del asesinado bajo la foto del cuerpo sin vida tendido en la acera del Señor Uria.

El pie de foto decía: "Los compañeros de partida de Uria poco después del mortal atentado. El segundo por la derecha sustituyó al empresario."

Gracias a esa foto han debido soportar insultos y descalificaciones, entre otros, de Carlos Iturgaiz, eurodiputado del PP, que sin perder tiempo mandó una carta al diario El Mundo para decirles lindezas como esta: "Dicen algunos que los seres humanos nos acostumbramos a todo, pero esa afirmación se hace muy difícil de aplicar cuando uno ve tras el asesinato de Ignacio Uria a manos de ETA la foto en portada de EL MUNDO, donde los compañeros de cartas de la víctima no perdonaron la partida diaria y jugaron vergonzosa e inhumanamente al tute como si no hubiera pasado absolutamente nada el mismo día del asesinato de su amigo."

Ellos, en las explicaciones que han tenido que estar dando, decían en Público: "Nos han manipulado, y desde entonces nos insultan en la tele y en los periódicos. Nosotros somos amigos de Inaxio y sólo queríamos rendirle un homenaje con una partida porque a él le encantaba jugar a cartas. Sólo nosotros sabemos cuánto sentimos que ETA le haya matado".

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